martes, 12 de agosto de 2014

Argos



                                                   
                        A mi gata, Argos
                                   
                                          
  Ha pasado ya un año desde el día
  en que te recogimos de la calle
  para darte un hogar. Ahora eres miembro
  de esta alegre familia. La ternura
  que siento cuando subes a mi mesa
  de estudio y te recuestas sobre pilas
  de apuntes y de libros por quedarte
  a mi lado, no puedo describirla.
  Cuánto has crecido en todos estos meses.
  Lo noto en que te cuesta desplazarte
  de la impresora al flexo, de las obras
  del siglo XVI hasta la esquina
  opuesta, en donde tienes la toalla
  que te suelo poner para que duermas
  un poco más mullida; ésa que ignoras
  por sentir en la piel el tacto suave
  de unos folios escritos con un amor tan grande
  como es este que sabes que te tengo.

(Poema de mi libro Apátrida. Hiperión. 2005)

             

2 comentarios:

  1. Un poema para disfrutarlo con calma
    con esa sencillez que da la ternura
    y la palabra cuando todo sucede dentro
    del corazón.

    enhorabuena!!!!

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